Hablamos de la pareja presidencial de Canadá, Justin Trudeau y Sophie Grégoire, que es una de las más atípicas en la historia presidencial, no sólo del país norteamericano, sino, probablemente, de todo el mundo. Justin y Sophie se conocen hace mucho tiempo, cuando ambos eran estudiantes y Sophie compartía materias con el hermano de Justin. Sin embargo, el amor nació entre ellos en el 2003.
La particularidad de esta pareja ha saltado más de una vez a la vista de todos: Sophie es una ex conductora de programas de televisión; Justin es el primer presidente en mostrar un tatuaje. Las llamadas excentricidades no son más que hechos de la vida diaria de cualquier persona, pero que nunca fueron toleradas en el ámbito público de la política. Sin ir más lejos, el presidente se ha mostrado haciendo yoga.
La pareja, así como sus ex homólogos, Obama, han hecho que el amor y la familia sean un eje importante de la política de Justin. Él es hijo de un importante líder, Pierre Trudeau y de Margaret, y ha sabido conjugar su imagen de hombre común con la del político encargado de los asuntos nacionales y el destino de un país entero.
Es innegable que Sophie posee un gran histrionismo ante las cámaras, ya que incluso ha cantado frente a una numerosa audiencia y ha sido declarada como una de las mujeres más sensuales del mundo. Algunos medios la comparan con Kate Middleton.
COmo se puede apreciar en las fotografías y en las situaciones que aparecen juntos, el romance entre Sophie y Justin no se esconde tras las cámaras, es público y tan natural como era el de los Obama cuando era presidente. Ellos se halagan y se ofrecen muestras de cariño ante la comunidad.
Entre las numerosas muestras de afecto, podemos ver abrazos, besos, bailes, caricias y miradas llenas de ternura que son sólo algunas de las escenas que Sophie y Justin comparten a través de sus redes sociales. Es tanto el foco de atención sobre ellos, que algunos se atreven a llamarlos “Los Kennedy de Canadá”.
Mientras los medios se debaten sobre el mejor calificativo para ellos, la pareja continua enfocada en sus labores y en su propia familia. Un gran ejemplo a seguir.