Josephine Desgrand llegó a pesar más de 120 kilos cuando solo tenía 17 años y la crueldad sobre su apariencia física estuvo presente durante toda su etapa de adolescente. Su apodo era “la gorda Josie” y diariamente escuchaba crueles comentarios y burlas sobre su aspecto, lo que la llevó a la adicción por la comida.
Cuando terminó la escuela se propuso cambiar sus hábitos y hacer un real cambio en su vida. Pero como le daba vergüenza ir a un gimnasio comenzó a ejercitarse en su casa con pequeñas rutinas diarias, sin embargo lo que detonó su transformación fue la eliminación total de los carbohidratos y el azúcar en su dieta.
Luego de casi 12 meses de dieta y ejercicios, ella logró perder casi 60 kilos, logrando desarrollar esa autoestima que nunca tuvo en su vida.
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“No tenía una mala dieta, pero comía grandes porciones y repetía hasta dos y tres veces la comida. También bebía muchos zumos de fruta pensando que eran sanos; ahora sé que están llenos de azúcar y no los bebo”.