La pequeña Madison de 7 años de edad y su hermano de 9, pidieron permisos a sus padres para hacerse un tatuaje de henna negra, durante un idílico viaje en Egipto. Sus padres aceptaron, la verdad es que es algo que todos los niños quieren, al menos una vez, ¿no?
Lo que sus padres nunca imaginaron, es que su hija era alérgica a la henna….
Toda la familia, es de Isle of Wight, del sureste de Inglaterra y juntos, fueron de vacaciones a Egipto, durante el verano. Sus hijos Madison y Sebastian, pidieron permiso para tatuarse con henna en el hotel e inocentemente, estos padres accedieron a la petición.
Sin embargo, a penas la pequeña se tatuó comenzó a quejarse de la picazón, la que pronto estalló en dolorosas ampollas por todo su brazo.
Ya en Inglaterra, llevaron a la niña a un hospital para que le cortaran las ampollas en una unidad especial para quemaduras, lo que le dejó enormes cicatrices permanentes a lo largo de todo su brazo.
Su padre declaró al comienzo, “no nos dimos cuenta que una parte del tatuaje comenzó a hincharse, pero no pudimos ver ningún tipo de enrojecimiento al comienzo”.
También agregó, “la mañana después del tatuaje, comenzó a picarle el brazo, así que lo lavamos y ahí nos dimos cuenta de que había erupciones al contorno de todo el tatuaje”.
Los doctores, primero recomendaron una crema con esteroides para tratar la zona afectada, pero cuando comenzaron a formarse ampollas, Madison fue rápidamente internada en la clínica.
¿Qué tan peligrosos son los tatuajes de henna?
A pesar de que los tatuajes de henna son temporales, el National Health Service (Servicio Nacional de Salud de Inglaterra) advierte que estos tatuajes de henna negra suelen contener altos niveles de tinte químico tóxico para la salud, además otras veces se le agregan otro tipo de colorantes a la tintura natural.
De acuerdo a lo indicado por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, “la henna negra se obtiene añadiendo a la henna natural, otro tipo de colorantes como la p-fenilendiamina o PPD, la que se encuentra prohibida para su uso directo sobre la piel, desencadenando reacciones alérgicas cutáneas graves“.
Y no solo eso, sino que también afirman que “la sintomatología de estas reacciones puede llegar a aparecer varas semanas después de su aplicación, pudiendo consistir estas en picor, enrojecimiento, manchas, ampollas o hasta la decoloración permanente de la piel y las cicatrices en la zona afectada, requiriéndose en algunos casos la atención médica urgente y hasta la hospitalización del paciente“.
Nunca olvides que, antes de aplicar cualquier producto sobre la piel, es necesario averiguar exactamente de qué se trata y más aún si se trata de la piel de los niños la que será expuesta.