El gato más longevo del mundo ha fallecido a los 32 años. Esto es, a los 144 años felinos.
El año pasado habíamos felicitado a Nutmeg en su cumpleaños número 31, por continuar siendo el gato más viejo del mundo. Tristemente, hoy le decimos adiós.
Los ingleses Ian y Liz encontraron a Nutmeg en su jardín un buen día hace 27 años. Como no tenían hijos, decidieron adoptar al peludo amigo. Y todos estos años los han pasado juntos, con Nutmeg siendo una parte más de la familia.
Liz e Ian han llamado a Nutmeg su hijo, y confesaron que no se podrían imaginar la vida sin él.
Él no es nuestro gato, somos sus humanos y nunca nos deja olvidar eso. Tal vez ese es el secreto de su larga y feliz vida.
Nutmeg rompió todos los récords de longevidad en un gato, pues la esperanza de vida tope para un felino casero es de dos décadas. Este minino llegó a vivir 32 años, que si los contamos en su equivalente felino ¡serían 144 años de gato!
A principio de 2017, el gato empezó a jadear así que su familia lo llevó al Westway Veterinary Group para que recibiera tratamiento. Allí, el gato se robó el corazón de todo el personal médico. Los especialistas dijeron que era el gato más considerado e inteligente de todo el veterinario.
Tristemente, Nutmeg debió pasar los últimos meses de su vida en aquel centro, debido a su delicada condición de salud. En agosto de 2017, el gato más longevo del mundo falleció a la edad de 32 años y su familia quedó desconsolada por la noticia.
Liz dijo que siente que realmente ha perdido a un hijo:
Ambos sentimos que nos han arrancado el corazón. Él era nuestro pequeño.
Al menos el tierno felino vivió una larga y feliz vida e hizo feliz a muchas otras personas. Lo extrañaremos.
¡Descansa en paz, querido Nutmeg!