Un angustioso momento vivieron testigos de como un niño de solo tres años se lanzó al vacío desde un cuarto piso. Dimitry (47 años) y Vadim (30) estaban trabajando en la calle, justo frente al edificio del niño, cuando lo vieron al borde de la ventana.
El pequeño, llamado Danya, se subió a una mesa y abrió la ventana mientras estaba bajo el cuidado de su abuela.
“Primero apareció la cabeza del niño en la ventana del cuarto piso. Luego las piernas. Corrimos hacia él y justo cayó. Lo atrapamos justo a tiempo y el golpe no fue tan fuerte. Comenzó a llorar, pero no perdió la consciencia. Llamé a una ambulancia”, le contó uno de los testigos al Mirror.
La abuela, en estado de shock, miró por la ventana mientras su tía iba corriendo al primer piso para ver cómo se encontraba su sobrino. Inmediatamente lo llevaron al hospital, donde fue dado de alta luego de unas horas con apenas una venda en su rodilla.
Aquel mismo día, en la misma ciudad de Saint Petersburgo, una niña de 5 años escaló hasta el noveno piso de un edificio. Según cuentan los medios locales, habría estado sola en su casa cuando sus padres salieron.
Por 20 minutos se mantuvo afirmada a una ventana abierta mientras la policía y vecinos intentaban entrar al departamento. La niña se encontraba llorando de miedo, pero lograron rescatarla sin heridas.
Jamás hay que dejar solos a los niños. Menos en edificios de altura.