Sólo han pasado unas pocas semanas desde que se hizo un anuncio histórico sobre el Príncipe Harry y la actriz Meghan Markle, quienes se comprometieron a pesar de las evidentes diferencias entre ambos, partiendo por ser de países y culturas distintas. Todos conocemos los antecedentes y a la familia de Harry pero no sabemos nada sobre Meghan.
La hermosa actriz norteamericana tiene 36 años y es originaria de Los Ángeles, California, e interpretó a la abogada Rachel Zane en la serie americana ‘Suits’. Además tiene raíces afroamericanas por parte de su madre e, irlandesas, por parte de su padre, eso explica su bello color de piel que lo heredó de Doria Ragland, su madre.
Según cuentan fuentes cercanas, el hecho de ser “birracial” es algo que Meghan ha sufrido y ha disfrutado a partes iguales y lo ha comentado en varias ocasiones. Incluso, en una entrevista reciente comentó:
“Ser ‘birracial’ dibuja una línea difusa que te hace tambalear y a la vez te ilumina. Mi herencia mixta ha creado un área gris alrededor de mi identificación, lo que me ha permitido mantener un pie a ambos lados de la verja. Y he decidido aprovechar eso. Para decir quién soy, para compartir de dónde vengo, para dar voz al orgullo de ser una mujer de doble raza, fuerte y con autoestima”
En la fotografía podemos ver a su madre, con quien tiene una estrecha relación, es psicoterapeuta e instructora de yoga y hace un año se graduó de la Universidad de South California en Educación Social. Según su página de Facebook, Ragland trabaja en el Didi Hirsch Mental Health Services de California. Lo cierto es que la suegra del príncipe Harry es una mujer sencilla que vive en un barrio popular de Los Ángeles.