Las pequeñas que participan en estos inusuales concursos de belleza infantiles parecen disfrutar del proceso, al menos la mayoría, pero nadie sabe el impacto que tendrán en la vida de dichas niñas al verse expuestas a la competencia por la manera en que lucen. Hoy en día, no hay límites en cuanto a qué hacer con las pequeñas para que ganen el concurso, es más, hoy es posible ver cómo padres son capaces de inyectar con bótox a niñas de 8 años para que luzcan “más bellas” y ganen en las participaciones. Pero el caso de “Maddy” es igual de controversial.
Ella es Maddy Jackson y tiene 4 años- Según varios portales, participa en concursos de belleza desde los 13 meses de edad.
Sin embargo, su belleza no es solo natural, sino que está acostumbrada a usar muchas capas de maquillaje y preparación extra que son parte de su rutina de belleza a sus cortos 4 años. El estrés, por supuesto, es parte de su infancia y la preparación de coreografías.
Todos sabemos que detrás de su participación en los concursos está el interés de sus padres que, a muy corta edad, las empiezan a producir a un nivel increíble y poco a poco generan ese ánimo de competición por los concursos de belleza.
Lo que ha causado la polémica es que en uno de los tantos concursos en los que participó usó un vestido muy particular. En él vistió un vestido pero debajo tenía implantes de pecho de copa C, así como un trasero aumentado simulando el aspecto de una mujer mayor. Según el medio Daily Mail, el intento de su madre y Maddy Jackson era que lograra a imitar a la cantante de country Dolly Parton, quien es conocida por tener una figura curvilínea y vestir un amplio escote.
La infancia de la pequeña ya es diferente al participar en estos concursos, pero sin duda lo es aún más, porque ella se ve forzada a simular ser una mujer mayor. No hace lo que el resto de sus pares hacen a su edad, que es jugar con muñecas, por ejemplo.
Desafortunadamente, no sabremos a ciencia cierta qué es lo que resultará de esta infancia distorsionada para Maddy y el futuro dirá si fue o no algo positivo en su vida. Lo cierto es que estos “concursos de belleza infantiles” mueven exageradas sumas de dinero.
