Más allá de cuestionar los cánones de los estándares de bellezas que nos han impuesto la sociedad, hoy en día, la obesidad es más que un tema estético y afecta directamente a la salud de las personas. Ese es el motivo por el que Olga Hernández de 41 años decidió iniciar un largo camino para bajar los muchos kilos demás y sentirse más saludable .
En el momento más extremo de su sobrepeso fue cuando llegó a pesar casi 180 kilos y con mucho esfuerzo más la ayuda de una manga gástrica pudo perder más de la mitad de su peso. A pesar de estar feliz por su gran logro, existía un detalle que no la dejaba disfrutar de su pérdida de peso y era la gran cantidad de piel suelta que tenía y colgaba.
Tras perder esa gran cantidad de peso y por muchos ejercicios para apretar que realizara, es inevitable que la piel no quede suelta.
“Me volví insegura y constantemente criticaba mi cuerpo. Pensé que era repugnante. No quería eso para el día de mi boda”, declaró al diario The Sun, diciendo que su único problema no era de autoestima, sino que también tenía muy irritada el área púbica por culpa de la piel.
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Lo positivo es que los días de inseguridades, irritación y tener que usar fajas ajustadas para sostener la piel terminaron, ya que Olga fue operada y ahora está muy feliz con el resultado. Y nosotros estamos felices por ella.
Sacaron 8 kilos de piel del estómago y otro poco más de los brazos, así, esta mujer recobró la confianza en sí misma.
El cambio es asombroso y ella luce feliz.
