La personalidad de los gatos siempre ha sido un misterio: antipáticos, egoístas, antisociales o gruñones, cualquiera de estos adjetivos los definen muy bien. Pero, ¿cuál será la razón de su forma de ser?
Un estudio de las universidades de Lincoln y Notthingham Trenten, del Reino Unido, reveló que los gatos pueden tener la misma personalidad de sus dueños, siendo un reflejo de ellos mismos.
Según la investigación, los gatos desarrollan un vínculo tan profundo con los humanos, especialmente con sus dueños, que terminan reflejando su personalidad. Por lo tanto, así como actúas tu, actúan ellos.
De alguna forma le contagias tus emociones y carácter, lo que les afecta directamente en su comportamiento.
“Los hallazgos sugieren que, así como la personalidad de un padre puede afectar la personalidad de un niño, lo mismo podría ser cierto para un gato y su dueño”.
Estudio de las universidades de Lincoln y Nottingham Trenten
El resultado de la investigación afirma que existe una relación entre las emociones del dueño, la influencia en el bienestar y el comportamiento de su felino.
Se examinó a más de 3 mil humanos y animales, a través de una encuesta donde se preguntaba principalmente por la salud y el comportamiento. A través del Modelo psicológico del Big Five Inventory, que evalúa y analiza la composición de cinco grandes aspectos de la personalidad:
- Apertura a nuevas experiencias
- Responsabilidad
- Extraversión
- Amabilidad
- Inestabilidad emocional
Por lo tanto, si el dueño presenta niveles de estrés, su gato probablemente se comportará de manera ansiosa y alerta, vinculado también con el sobrepeso del animal. De igual forma, si los dueños son extrovertidos, los felinos tienden a ser amables y sociables.
Prodríamos decir que: “De tal humano, tal felino”. Puedes revisar la publicación completa aquí y la investigación en la revista Plos One.