La Carne De Pollo Contiene Arsénico Y Es Una Posible Causa De Cáncer

El pollo es una de las carnes más consumidas en el mundo entero  ya que es deliciosa y versátil. Existen muchas formas de prepararlo, puede ser al horno, frito, mezclado con arroz, entre muchas otras maneras. Sin embargo, ahora debemos tener extremo cuidado al comprarlo y se debe vigilar las veces que se consume por semana o por lo menos saber de dónde proviene pues  muchos de los pollos han sido contaminados por una sustancia conocida como arsénico. Existen estudios que demuestran la presencia de arsénico en los pollos y los porcentajes que se obtuvieron en los estudios realizados .

 

 

Para ahondar más en el tema, el arsénico es considerado veneno para el ser humano, es decir, es sumamente tóxico para nosotros, y de acuerdo a dichas investigaciones podríamos llegar a desarrollar  cáncer, entre otras enfermedades en caso de que lo consumamos en mucha cantidad y con alta frecuencia.

Según estudios, un 70% de los pollos han sido contaminados con esta sustancia, pues supuestamente les da un look más robusto al animal por lo que pensamos que el pollo es de mayor tamaño, pero no es la realidad  y de paso, están infectados con arsénico. También les da un toque rosado como si el cerdo.

Según un informe realizado en el año 2006, esta cantidad fue recolectada en las pruebas realizadas sobre pollos tomados de forma aleatoria, es decir, no era de una industria en específico. De esta forma cuando comemos el pollo vamos contaminando nuestro organismo poco a poco y son estos los casos de personas que no saben porqué pero en veinte años tienen cáncer en diferentes partes del cuerpo.

Según lo indica el informe,  el pollo contaminado es considerado cuatro veces más tóxico que el mercurio, imagínense cuánto daño puede causar a nuestra organismo, es por eso que lo que nos debe preocupar en este minuto es lo que podemos hacer en contra de esta mala práctica que sólo busca enriquecimiento económico por parte de los productores de pollos. Lo que te recomendamos es comprar el pollo orgánico que tengas a tu disposición  o que establezca que no ha sido alimentado por nutrientes especiales. Nunca dejes de prestar atención al origen del pollo que le darás a tu cuerpo y a tu familia.