Esta nota se trata sobre una imagen particular y conmovedora vivida en el amazonas, pues las mariposas y abejas beben lágrimas de las tortugas y es precisamente eso lo que las ayuda a sobrevivir. Los hechos se remontan al año 2013, cuando científicos de Perú observaron que las mariposas en el Amazonas acudían a las cabezas de las tortugas para beber sus lágrimas, lo que les proporciona una fuente vital de mineral de sodio. Es un proceso biológico, pero eso no quita que sea una imagen de solidaridad extrema.
Las lágrimas de la tortuga contienen sal, específicamente sodio, un mineral importante que es escaso en el oeste de la Amazonía. Así que, de alguna manera la “tristeza” de las tortugas se convierte en milagro en el ecosistema.
Causas
Debido a que está a más de 1.600 kilómetros del Océano Atlántico (fuente principal de sal), la Amazonía occidental es más baja en sodio que muchos lugares en la Tierra y está separada de las partículas minerales arrastradas por el viento hacia el oeste por las montañas de los Andes. A pesar de que el polvo y los minerales llegan al Amazonas desde el este (a veces desde el norte de África); gran parte de este material es eliminado por la lluvia antes de que llegue al oeste de la Amazonía. Es lo que expresó en una entrevista a Live Science Phil Torres, biólogo conservacionista que hace su investigación en el Centro de Investigación Tambopata en Perú.
De manera muy diferente a las mariposas, las tortugas obtienen suficiente sodio a través de su dieta carnívora. La carne contiene niveles significativos de sal, le dijo Torres a LiveScience. Pero los herbívoros a veces luchan por obtener suficiente sodio y otros minerales, agregó. “Terminan necesitando esta fuente mineral adicional”, dijo. Las abejas también pueden ser atraídas por las tortugas. Parecen molestar a los animales más que a las mariposas, tal vez debido a sus alas zumbantes, dijo Torres.
Las lágrimas de tortugas no son las únicas proveedoras de dichas sales para las mariposas; los insectos también obtienen la sal de la orina de animales, riberas fangosas, charcos, ropa sudada y gente sudando, dijo Geoff Gallice, un estudiante graduado de entomología en el Museo de Historia Natural de la Florida, que ha visto mariposas acudir a las lágrimas de las tortugas en el Selva tropical del Amazonas occidental. Aquí las mariposas son vistas como “charcos”, recogiendo minerales del lodo.
