Un gesto que nosotros consideramos mínimo puede generar un cambio milagrosos en otras personas, y la historia que te contaremos a continuación es una muestra de ello.
Raquel solía cuidar de una pequeña niña que dibujaba bastante, y le decía siempre que le encantaban sus dibujos. La niñera ponía voz de comentarista deportivo y le decía lo bonito que era su arte, animándola a continuar dibujando.
Años más tarde, la niña ya crecida ha sido aceptada en tres grandes escuelas de arte, y le está tan agradecida a su niñera que le escribió una tierna carta para agradecerle su gesto de apoyo.
Raquel es una niñera que quiso compartir su tierna historia para que entendamos lo importante que es dar ánimos:
La historia ha resonado en cientos de personas, quienes la han compartido y han vuelto viral:
>
Es sin duda una lección que demuestra el impacto positivo que podemos tener en el mundo.
