La NASA está investigando el X3, uno de los tres dispositivos que utilizará en futuras misiones tripuladas a Marte, destinadas a reducir los tiempos de viaje y la cantidad de combustible necesario.
Este motor batió un récord nunca antes conseguido por un propulsor de efecto Hall, durante una prueba reciente, logrando mayor potencia y empuje, según informa Science Alert.
Fue titulado el “motor imposible”, ya que ni los científicos lograron definir completamente sus propiedades, logrando 5,4 newtons de fuerza en comparación con el antiguo récord de 3,3 newton. Además mejoró la intensidad de corriente eléctrica (250 amperes frente 112) y ligeramente la potencia (102 kilovatios frente a 98).
En el Centro de Investigaciones Glenn de la NASA en Cleveland, EE.UU. fue realizada la prueba por Scott Hall y Hani Kamhawi, el primero es estudiante de doctorado en ingeniería aeroespacial en la Universidad de Míchigan y Kamhawi es científico de la NASA muy involucrado en el desarrollo del X3.
Este propulsor funciona al convertir pequeñas cantidades de propulsor en plasma cargado con campos eléctricos, que luego se acelera muy rápidamente utilizando un campo magnético. Una de sus ventajas puede alcanzar velocidades máximas utilizando una pequeña cantidad de combustible, al contrario de los cohetes químicos.
Probar este tipo de propulsores en la Tierra no es sencillo, ya que se necesita una cámara de vacío con la suficiente capacidad para instalar el motor. Luego hay que extraer todo el aire de la cámara, un proceso que dura alrededor de 20 horas.
Durante el próximo año, el equipo pretende realizar más pruebas en el laboratorio de Gallimore utilizando una cámara de vacío mejorada.