Tampoco sonrió cuando nació su hija.
Por 40 años, Tess Christian no ha vuelto a sonreír desde entonces. Pero no creas que se debió a alguna tragedia sino porque cuando tenía 10 años decidió que lo mejor para mantenerse joven era dejar de hacerlo.
Entonces cada vez que sale con sus amigas, va a una fiesta, ve una película graciosa o le cuentan un chiste siempre tiene una cara impávida y sin mover ni un músculo. A estas alturas, ya se le hace fácil.
Según la mujer “No tengo arrugas porque he logrado controlar mis músculos faciales. Me preguntan si uso Botox, pero les digo que no. Sé que todo es porque no he vuelto a sonreír. No río o sonrío desde que era una adolescente. Y he logrado resultados evidentes”.
De hecho, no sería la única. Kim Kardashian ha confirmado en entrevistas que trata de sonreír muy poco para que no se le formen muchas arrugas. Y según algunos médicos esto podría funcionar.
“Sabemos esto porque así funciona el Botox y es que reduce la actividad muscular. No sonreír es una opción, pero sin duda es difícil mantener el ritmo y puede ser muy aburrido para tu pareja y confundir a tus hijos“.
Tess quiere dejar en claro que no sonreír cuando pasan eventos importantes, como el nacimiento de su hija, no significa que su vida sea miserable o infeliz. Simplemente no tiene porqué demostrarlo con su rostro.
Incluso cree que no sonreír la hace ver más bonita porque al tener mejillas grandes, la harían verse como “un hámster”.
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Y así luce con 50 años, tras pasar 40 de no mover ningún músculo en su rostro.
