El día de hoy te comentamos sobre algunas de las señales de alerta que nuestro organismo nos envía y que no deberíamos ignorar jamás, pero casi siempre lo hacemos. Nuestro organismo es un mecanismo perfecto, donde muchos procesos internos ocurren al mismo tiempo. Parece magia, pero necesitamos ver las señales que nos envía de vez en cuando, para no interrumpir el correcto funcionamiento de este mecanismo perfecto.
1. Insomnio, irritabilidad y calambres en los pies
Si presentas alguno de estos signos, quiere decir que a tu organismo le hace falta magnesio y potasio. Para recuperar el déficit de estos elementos importantes, debes incluir en tu dieta diaria tomates, naranjas, plátanos y espinacas. Así poco a poco irás recuperándote.
2. Piel seca
Si presentas resequedad en la piel, podría ser un indicador de que a tu organismo le hace falta vitamina E, por lo que hay que aumentar el consumo de verduras, aceite, nueces y pescado.
3. Necesidad de comer dulce
4. El deseo de comer hielo
En ocasiones las ganas de comer hielo son un signo de que tienes anemia y tu organismo siente déficit de hierro. Las mejores fuentes de hierro son la carne de res, los huevos y mariscos. Por supuesto que debes ir al médico si se te antoja el hielo y te faltan energías. No esperes a que sea demasiado tarde.
5. Te sangran las encías
Este es un signo de que a tu organismo le hace falta vitamina C. Los alimentos que deberías incluir en tu dieta son: cítricos, espinacas, pimientos rojos y verdes, tomates, coliflor, repollo y brócoli. Son alimentos fáciles de incluir en la dieta.
Si tus uñas están quebradizas, tu organismo te dice que necesita vitamina B. En esta situación hay que beber más leche, consumir algas nori y setas. Todas cosas muy deliciosas, así que no serán un problema.
7. Aro alrededor del ojo
Este aro puede aparecer en personas mayores de 50 años y es normal. Pero aparece en alguien joven, quiere decir que tiene colesterol alto. Se debe acudir al médico con urgencia.
8. Pie griego
Se sabe que una persona tiene “pie griego” cuando el segundo dedo del pie es más largo que los demás. Este detalle anatómico podría provocar callos y molestias en los dedos. Es más, el hecho de usar calzado puede llegar a ser bastante incómodo, por lo cual debes tener cuidado con los modelos y el estilo que eliges. Busca tu comodidad siempre.
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