César Kibler es una joven salvadoreño de 30 años que ha estado toda su vida aferrado a sus bolígrafos, con la esperanza de convertirse en un artista reconocido. Dibuja desde los 5 años y no cabe duda que merece ovaciones por las maravillosas creaciones que realiza a partir de simples bolígrafos.
Su carrera comenzó desde pequeño y debido a los pocos recursos económicos de su familia, debió apostar por el dibujo a bolígrafo, ya que “están al alcance de la mayoría”.
Fue así como en un recurso tan simple, encontró la perfección y hoy realiza sus dibujos con lapiceros comunes y corrientes.
A pesar de que podría haber cambiado por otro implemento para dibujar a medida que crecía, no dejó los bolígrafos.
“Es mi medio de expresión artística, y en este momento estoy enfocado en dominar el mismo. Lo escogí también por su complejidad”.
César Kibler
“El bolígrafo es una herramienta de bajo costo y portátil, no es como comprar un set de yeso pastel o pintura para oleos, esas son algunas de las características por las cuales me decidí a utilizarla”.
César Kibler
La única particularidad es que estos bolígrafos con a base de aceite, pero de todas maneras se encuentran fácilmente en librerías.
Cada dibujo le toma aproximadamente 2 semanas de trabajo y dependiendo de la complejidad, incluso puede ser más. De todas maneras, todo el tiempo que demora valen la pena para el maravilloso resultado que se obtiene.
Casi siempre sus dibujos se centran en rostros de personas o caras animales, en donde se pueden ver todos los detalles y fineza de sus obras.
César señala que su razón para pintar rostros, es porque son “el reflejo del alma”. Los ojos y los labios son las zonas a las que más les dedica atención al momento de crear, ya que son áreas donde las impresiones son difíciles de disimular.
No solo se trata de tomar los lápices y dibujar, el salvadoreño asegura que después de cada trazo, asea las puntas de sus lápices para evitar derrames de tinta y arruinar su trabajo, ya que con un solo error, tendría que volver a comenzar.
Tiene toda una carrera por delante, su dedicación, pasión y talento se pueden apreciar a simple vista en sus hermosas obras.