La mítica historia de Shakespeare parece trascender en el tiempo y para los románticos empedernidos esta nota será un alivio. Las personas que creen en el destino y aman “Romeo y Julieta” estarán felices con esta romántica noticia.
La historia comenzó en una sala de partos cuando Morgan estaba a punto de conocer por primera vez a su bebé, después de 9 largos meses. 18 horas después, el destino quiso que nadie olvidara ese día y decidió que Christiana también entrara en labores de parto para por fin conocer a su hijita. Eran dos madres que nunca se habían conocido, pero que fueron unidas por el destino cuando ambas dieron, con 18 horas de diferencia, a luz a sus hermosos hijos.
Morgan y Edwin Hernandez nombraron a su hijo Romeo, mientras que Christiana Shifflet y Allan nombraron a la suya, Julieta. Con 18 horas de distancia en nacimiento, ambos fueron puestos uno al lado del otro , después de llegar a este mundo.
Increíblemente, sus bebés se llaman Romeo y Julieta. Por estas increíbles pero siempre certeras casualidades de la vida, estos dos “tortolitos” le dijeron hola al primer rayo de luz que han visto, juntos. Esta increíble historia ha sido compartida por Love What Matters:
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Queremos saber si llegarán a tener un romance estos pequeñitos.
