Millones de mujeres son acosadas y abusadas todos los días al rededor del mundo, y aunque sea en un espacio público, nadie a su alrededor reacciona o se manifiesta en contra del agresor, simplemente se convierten en espectadores.
En el transporte público es donde más situaciones de este tipo se generan, ya que es normal acercarse o rozar sin intención al resto de las personas que están en el lugar.
Pero algunos hombres utilizan esto como una excusa para acercarse mucho a las mujeres e intentar propasarse con ellas.
Esto fue lo que le ocurrió a una chica que iba sentado al lado de un hombre que pretendía estar dormido a su lado, pero llevaba su mano estirada para tocarle las piernas.
La mujer grabó el momento y lo subió a las redes sociales, pero recibió algunas críticas por utilizar una falda demasiado corta y estimular, de alguna forma, el acoso. Otros criticaron al hombre por intentar propasarse con ella.
Lamentablemente el mundo aún no comprende que los que están mal en esta situación son los abusadores y no las mujeres.