Un padre desesperado luego de que no resultara el tratar de hablar de forma civilizada con un niño de 15 años, quien durante mucho tiempo molestaba a su hija diciéndole “Godzilla”, puso sus manos alrededor del cuello del joven con el objeto de, presuntamente, ahorcarlo. Dicha situación fue filmada por los amigos del joven, quienes después de ver al padre lanzarse sobre él, comenzaron a gritarle que lo dejara.
El hecho sucedió en un parque ubicado en la localidad de Queensland, Australia, la razón fue la actitud adoptada por el muchacho cuando Mark Bladen, el padre de 53 años, se acercó a hablarle.
Después de exigirle que dejara en paz a su hija, el joven comenzó a reírse deliberadamente, haciendo enojar al padre, quien en menos de un segundo se abalanzó sobre él.
Pasó por meses y a pesar de las incansables peticiones de la víctima, el muchacho de 15 años continuaba con su cometido de hacer su estadía en la escuela un infierno. El bullying no sólo se tradujo en crueles sobrenombres, ya que en múltiples ocasiones el adolescente le entregó obsequios tales como una crema de afeitar junto a una nota que rezaba “Aféitate”.
Familiares y amigos del padre han avalado su actuar, asegurando que no hay límites a la hora de velar por la seguridad y protección de la familia, sin embargo hay quienes han salido a manifestar que se trataría de un abuso de poder, teniendo en cuenta la diferencia de edad entre Mark y el muchacho.
“Siento mucho lo que hice, estoy muy arrepentido y avergonzado. Por favor no hagan lo que hice, sólo perdí el control. Definitivamente no es la forma para arreglar las cosas”. Declara el padre.
“Cuando era joven tratábamos a las mujeres como damas y ahora debería ser lo mismo”.
Se desesperó ante una problemática sin salida
Debido a que el bullying traspasó las paredes de la escuela y hoy se encuentra inserto en redes sociales, las víctimas sufren daños aún más graves por el alcance que puede llegar a tener una publicación, fotografía o vídeo que vaya en directo perjuicio de la víctima. El tremendo aumento que ha experimentado el bullying en las escuela alrededor del mundo, ha permitido que muchos decidan optar por la violencia para proteger a quienes se han convertido en víctimas
Las víctimas no sólo son adolescentes, sino que también son niños pequeños de incluso menos de 10 años de edad, quienes prefieren callar su dolor y terminan ahogándose en su propio infierno. Los comentarios crueles suelen ser repetidos en internet, en donde a través de las múltiples plataformas que hoy existen, son divulgados y se vuelven prácticamente viral.
A pesar de que cada día los estados y las escuelas implementan nuevas acciones y políticas para erradicar el bullying de sus salas de clase, la verdadera solución recae en los padres, en la educación que se enseña al interior de un hogar.
Si bien los niños reciben lineamientos por parte de sus profesores de no molestar a quienes se encuentran a su alrededor, si los padres no los crían con una educación basada en la tolerancia y el respeto, no hay muchas herramientas para combatir el bullying. Empecemos por casa.