Los niños dejaron de ser aquellas personas que sólo juegan y obedecen. Porque claramente están cada vez más despiertos y no se dejan pasar a llevar con nada y te lo hacen saber como sea.
Como el pequeño de las imágenes. Tiene apenas 3 años pero está dispuesto a dar sus argumentos con lo que encuentra injusto. El pequeño discute con su madre sobre la cena de ese día. Estaba molesto porque quiere hacer valer sus derechos en la elección de lo que va a comer.
Es un situación curiosa y entretenida. Aunque si lo hubiéramos hecho en nuestra época, seguro nos hubieran callado en un segundo con tapaboca monumental…todavía recuerdo los míos ¡auch!
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