Los perros y los niños se parecen en muchos aspectos y nos lo demuestran día a día cuando se emocionan compartiendo tiempo juntos.
Las actividades al aire libre son, por excelencia, las preferidas de nuestras mascotas y también de los niños. Ellos tienen la energía suficiente para correr, saltar, jugar y mancharse en el proceso cuanto sea necesario.
Sin embargo los perros, evidentemente, tienen mayor libertad a la hora de jugar cuando todo está rodeado de barro y este labrador así lo demuestra cuando vio un gran charco de barro en mitad del paseo por el campo.
Harleys no lo pensó dos veces y corrió hasta el lugar para rebozarse en la tierra.
Se divirtió mucho más que con un paseo normal.