Si alguien te dice que existe un gato tierno y pequeño que es el más letal del mundo, estamos seguros que no lo creerías.
Claro, sólo pensarías en algún felino como un tigre, una pantera o hasta un león, pero la realidad es que si hablamos por tamaño, el más mortífero y pequeño es uno que se ve tan tierno que provoca abrazarlo.
Estos gatos son los Gyra. Se les conoce como excelentes cazadores porque la mayoría sus ataques son exitosos.
Pesa lo mismo que una bolsa de azúcar y a simple vista es muy parecido a un gato doméstico pero es mucho más mortal de lo que aparenta.
Estos felinos de patas negras les gusta salir a cazar por las noches y viven en Karoo, un desierto ubicado al sur de África. Mide unos 35 centímetros de largo y caza principalmente pájaros, roedores, escorpiones, jerbos y lo que se mueva.
Las apariencias engañan y pueden ser peligrosas.