Para los delincuentes, el trabajo que realiza la policía es no de los más molestos y odiados. Los policías pasan a ser los malos de la película para quienes viven del crimen.Sin duda, están en un constante riesgo al perseguir asaltantes, asesinos o incluso, conductores que no tienen su licencia, y esas carreras también pueden ser mortales. La historia de esta ocasión se desarrolla en Tennesse, Estados Unidos, cuando un policía comprobó el riesgo de su profesión luego de que una mujer intentara darse a la fuga y lo mordiera, con este último acto, lo condenó de forma perpetua.
Un Chrysler 300 iba por la carretera cuando dos oficiales lo detuvieron para realizar una revisión debido a que tenía visiblemente un permiso expirado. Los dos oficiales detuvieron el automóvil y la conductora se bajó del auto. Mientras uno le realizaba preguntas y para su sorpresa, se enteraba de que la mujer ni siquiera tenía licencia de conducir, otro revisaba el automóvil.
En su interior encontraron marihuana, crack y hasta cocaína en grandes cantidades. Los agentes la detuvieron; sin embargo, ella solicitó ir al baño aunque su real intención era escapar del lugar y su seguro paso por la prisión.
En ese momento se liberó y corrió, pero uno de los oficiales la atrapó nuevamente y la retuvo. En un acto de violencia y desesperación, la mujer se defendió y mordió salvajemente el brazo del oficial, pero su compañero logró esposarla y reducirla.
La mujer, identificada como Dayton Smith fue llevaba a prisión. No obstante, mientras constataba lesiones les reveló algo impactante: era portadora del SIDA, según reportes del RelayHero. Si bien el VIH no se contagia por saliva ni menos por una simple mordida, la herida que provocó con su mordisco dejó la carne expuesta y, como se ven en las imágenes, ella sangraba debido al forcejeo. El resultado: tendrán que realizar un análisis de VIH al policía.
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